El desaparecido

Al mirar por la ventanilla me encontré con la gran luna llena que aparecía y desaparecía entre las nubes del anochecer. Corría paralela al trazado del coche y su esfera perfecta se dejaba ver entre los senos de las montañas. Al estudiarla con detenimiento en un trayecto de meseta me abrumó lo anómalo de su mirada.
Entonces le dije:

Estás extraña, hace mucho que no te dejas ver en el cielo, me pareces una exiliada que acaba de volver a su patria

Sin perder su solemne estatismo ella dejó pasar un par de nubes y bajo la perpleja mirada de las primeras estrellas me contestó con su voz de luna (la terrible y vieja voz de luna):


¿Y no serás tú el que lleva un tiempo desaparecido?

Comentarios

fag ha dicho que…
cojonudo desaparecer, eh?
cojonudo y necesario muchas veces

sigo leyendo
BLIS ha dicho que…
Es un texto humilde en apariencia pero muy evocador. Me gustan esas joyas que aparece por tu blog.
Te leo
;)
Unknown ha dicho que…
belleza en estado puro. saludos

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