Fuegos fatuos
Por el día
voy recogiendo,
como un coleccionista,
los asombros que disemina tu recuerdo
Al llegar la noche
los guardo uno a uno
desordenándolos a propósito
entre las sábanas,
y más tarde,
cuando no hay mucho más
que espejos en la madrugada,
me despiertan unas cosquillas insoportables,
son los asombros encendiéndose
como cerillas diminutas,
traviesos fuegos fatuos
portando el mensaje maravilloso
de tu sonrisa
Comentarios
Ay Tin! que maravilla!
(y que contraste...)
muamua!