Dos ensoñaciones y un poema precipitado

Últimamente, repentinamente y sin planearlo, hago la media con el tiempo y los lugares. Hay instantes que podrían ser cualquier instante de mi vida. Un momento preciso del pasado, un momento difuso del presente, un momento indeterminado del futuro.

 

También percibo con extrañeza los lugares. Los lugares ubicuos. Los indiferentemente próximos, los asépticamente lejanos. Lugares que neutralizo contra mi naturaleza como si nada me apegase ya al espacio. Ayer por la tarde, en el medio del campo, desafiando a la memoria y a la velocidad.
 

 No sé si esta búsqueda es inmadurez o inconformismo:
 

 


 


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