Pronto caerá la noche
Con los pies llenos de barro llego a un pedestal, el monolito del presente donde el tiempo sangra y se desvanece a la vez. Desde aquí arriba se ven los baches del camino, la cuneta que cuida de sus muertos, los remolinos de viento que quise hacer míos (todos los intentos y caídas, las máscaras del Fenix, Holden caminando por los campos, sombras desde la caverna ) Veo la presencia animal del mar, y la montaña a lo lejos como un padre nuestro enterrado en la recámara del pasado. Giro ciento ochenta grados y cargo la brisa a la espalda. El suelo se enfría. Pronto caerá la noche.