Una tarde de sol


Qué pena no ser ave de paso, ni derrota de carta marina.
Qué dulce ser trapo blanco henchido al viento del velero que alegre se encabrita.
Qué lento ser ciprés viviendo erguido al cielo y saber que todo en este mundo necesita su tiempo.
Qué pena no ser ave de paso ni proa que acuchilla siete mares.
O relumbre del zarcillo de bella muchacha que descalza baila por los parques.
Busco el ruido de las plazas. Busco en las calles de ciudades que ya no conozco
...
Guardo una tarde de sol por si hace falta, ése es un tesoro que nadie podrá arrebatarme


Una tarde de sol. Manolo García
Del disco Para que no se duerman mis sentidos

Comentarios

Estefania ha dicho que…
la verdad es que Manolo Garcia no me gusta nada, jaja.
pero este trozo de cancion es bonito!nadie nos quitara las tardes de sol...

besos :)
Roberto Tega ha dicho que…
Jaja. No es la primera vez que oigo eso. Me parece que la gente en general aborrece un poco esa voz extraña que tiene y sus poses de eterno ochentero. Pero la verdad es que tiene unas letras increíbles y algunas tan cojonudamente rurales que parece que está hablando de mi pueblo. Y por eso simplemente me encanta :D

Un saludo Tefi (estudia!)

Entradas populares de este blog

Mujeres (Manuel Vilas)

3ª y 2ª persona del plural

El sabor de la manzana