Grecia


Hoy en Francia estuve recordando
cómo luchábamos en la cama.
Cómo nuestras bocas eran
artilugios imanes del deseo.
Ayer fue Japón
y era sólo mi cobardía,
la sucesión de silencios,
la violencia de estos
mil kilómetros.
Mi alternativa única es joderme,
quiero decir Grecia,
o la más impresentable
de las ausencias.

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