A veces
A veces me parece
que las horas
son como la distancia
que separa al nadador
del fondo del mar:
el abismo difuso y estremecedor
delimitado por dos puntos
de naturaleza radicalmente opuesta
Todo está contenido
en esa geometría de agua,
en ese pasillo extraterrestre
donde viven en libertad
obviedades físicas alteradas,
algas y decepciones,
alguna explosión de felicidad.
También es verdad
que éste es un vértigo cotidiano,
no tiene mucho que ver
con la percepción espantosa
con que a veces,
en cierto momento de la travesía,
nos asomamos
a la inexacta medida de los años.
Comentarios
Aunque a veces es inevitable sentirse oprimido por su percepción cotidiana
Así que centrémonos en caminar, y no en lo que conlleva el recorrido